*En el mercado “Cosme del Razo” en San Pedro Cholula se prepara un manjar hecho a base de maíz azul, relleno de frijoles con su distintivo toque de hoja de aguacate.
Jaime Carrera
San Pedro Cholula, Pue.- En uno de los pasillos del mercado “Cosme del Razo” en San Pedro Cholula, un grupo de mujeres alzan la voz para atraer a los visitantes mientras agitan unas enormes y gruesas tortillas de color azul: las famosas memelas gigantes conocidas como “orejas de elefante”.
“Pásele, pásele, aquí hay lugar, qué le servimos: gorditas, picaditas…”, dicen a los hambrientos que se asoman entre los negocios de alimentos. “Una oreja de elefante, pásele”, repiten mientras muestran ese manjar hecho a base de maíz azul, relleno de frijoles con su distintivo toque de hoja de aguacate.
El curioso antojito es el alimento predilecto de los amantes de las memelas, pero estas mucho más grandes y llenadoras, acompañadas de salsa roja o verde, cebolla picada y queso o quesillo que se estira al morder las orejas de elefante, también llamadas petroleras —por negras—, sábanas o cortinas.
Para darse una idea del tamaño de las grandes memelas basta con compararla con una mano promedio, pues su contorno las sobrepasa e, incluso, se desbordan del plato donde se sirven en el tradicional, colorido y peculiar mercado municipal de San Pedro Cholula, ubicado a una cuadra de su zócalo.
La variedad de sazones a probar es amplia, las orejas de elefante se venden en los antojitos Doña Luz, Jovita, Manuelita, Karla, Cecilia y Silvia, negocios que, en algunos casos comenzaron a funcionar desde hace seis décadas y que han perdurado con el paso del tiempo con una oferta gastronómica vasta.
En el mismo corredor culinario del mercado, las voces de las mujeres se confunden, pero hay clientela para todos los establecimientos y en cada comal se cuecen las enormes memelas a las que también se les pueden agregar ingredientes extra como chicharrón, champiñón o según lo pida el comensal.
Su origen es inexacto, aunque existen muchas historias al respecto, pero predomina la versión de ofrecer gorditas que resultaran más atractivas visualmente y que llamaran la atención de los amantes del maíz, y después de los años, el platillo típico de San Pedro Cholula ha perdurado por generaciones.
En las mesas la gente se alista para darle una inmensa mordida a su respectiva oreja de elefante, que desde que es preparada en el comal, su cocción produce un humo que contiene los sabores tradicionales de un pueblo milenario como Cholula y que sorprende a los turistas con llamativos antojitos.
Acompañada de un jugo de naranja, un café de olla o un refresco frío, las memelas gigantes acaparan los sentidos de sus degustadores y cada día, las expertas cocineras del mercado “Cosme del Razo” se preparan para convencer a los clientes de comer en sus negocios, con comales listos para la acción.
Masa azul que se aplana y se le da forma perfecta de una oreja de elefante, echada con estilo al calor del fuego, una volteada, dos cucharadas de salsa esparcida en la totalidad de su tamaño, espolvoreada de queso y el toque preciso de cebolla para un efecto crujiente y listo: a disfrutar los sabores de Cholula.